domingo, 23 de mayo de 2010

amanece que no es poco


En este pueblo situado al sur del sur, son casi siempre los amaneceres los que se tiñen de rojo. A pesar de que las estrellas sean diferentes y por mucho que uno busque nunca encuentre la Osa mayor, a pesar de que en verano sea invierno y en primavera otoño, a pesar de todas las diferencias, el sol sigue saliendo por el Este. Hay cosas que nunca cambian.
Tumbados en la cama queda al fondo el Este y podemos contemplar sin movernos unos espectaculares amaneceres. Las nubes van perdiendo oscuridad y adquiriendo tonalidades anaranjadas, hasta que, si estas se abren para dejar pasar al primer sol, durante diez minutos todo se impregna de rojos infinitos.
El sol sigue saliendo por donde siempre, sin embargo para ver amanecer en lugar de madrugar hay que demorarse un poco en la cama. Estas fotos son de hace un rato, a las 9:25, antes todo es oscuridad. Dicen que bien entrado el invierno no amanece hasta cerca de las 11.
Aunque sea domingo me toca traducir una horas por la mañana. Al mediodía nos ha invitado un compañero de Ara a navegar en su barco por el canal de Beagle, buen plan para un domingo soleado. ¡Pronto llegarán más fotos!

1 comentario:

  1. Por fin conseguísteis que os lleven en barquito, me alegro! disfrutad mucho. Os quiero!!

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